CURA DE FRESAS– Beber cantidades industriales de agua a palo seco no es demasiado agradable, pero si en lugar de agua bebemos zumo de fresas, la cosa cambia. Licúa unas cuantas fresas, filtra el zumo para eliminar los granitos y añade abundante agua. Conseguirás un zumo refrescante y ligero que, además de eliminar líquidos, te ayudará a desintoxicar el organismo. Bebe un litro al día de esta preparación hasta que cese la sensación de hinchazón.
CENAS ADELGAZANTES– Hay verduras, como las judías verdes, los berros, los espárragos y el calabacín que combaten la retención de líquidos y hacer perder peso. Toma alguna de ellas a diario, preferentemente durante la cena, y te sentirás mejor. No tires el agua de cocción de estas verduras, si tomas un tazón antes de las comidas, conseguirás que el efecto sea más intenso.
GROSELLAS– Y por último, un remedio que te irá de perlas. Se trata de la infusión de hojas de grosellero negro. Dos tazas de esta diurética bebida al día antes de las comidas te ayudarán a eliminar todo ese líquido que atasca tu organismo.