Tinte de ropa: Los monjes budistas tiñen sus vistosas túnicas naranjas con agua de azafrán. De hecho, esta especia es uno de los tintes naturales más antiguos que existen. Si quieres darle un color diferente a tus prendas blancas o de colores claros, ponlas en remojo en un barreño con agua caliente donde habrás echado unas cuantas hebras de azafrán. Obtendrán un bonito color anaranjado.