¿AGUA DE MAR O PATATA?– Aquellas familias que vivían cerca del mar solían acercarse hasta la playa para recoger litros de agua que luego hervían. El secreto de este remedio reside en el beneficioso efecto que ejerce sobre algunos tipos de reúma la combinación de los minerales del agua salada y el calor. Las abuelas aplicaban paños calientes empapados en esta agua en las zonas doloridas. Y las que no tenían posibilidad de conseguir agua del mal hervían patatas con su piel, cuyo efecto es similar La forma de aplicación era la misma. Lo importante es conservar el calor, por eso retiraban el paño cuando se enfriaba y volvían a colocarlo bren caliente.
EL ALIVlO AFRICANO– Otro remedio. En África se descubrieron por primera vez las virtudes del harpagofito para el reumatismo. Hacían un cocimiento con 10 gramos de la raíz en un vaso de agua y, tras filtrarlo, lo bebían en pequeñas dosis durante el día.