UNA RICURA DE MIEL– Intenta tomar en ayunas una infusión de tila bien caliente aderezada con unas gotas de limón y tómate a palo seco una cucharada de miel, que te ayudará a eliminar el alcohol y mantenerte más despejada. Pero no creas que tomándote este preparado ya lo tendrás todo solucionado.
STOP A LA INTOXICACIÓN– Las abuelas ponían en marcha un plan de choque para desintoxicar el organismo del alcohol, conscientes de los daños que la bebida causa sobre todo en el hígado. Solían recurrir al diente de león, cuya raíz es un potente desintoxicante. Cocían 20 gramos de raíz de diente de león en un litro de agua y lo daban a tomar al “resacoso” durante el día.
A POR EL CARDO MARIANO– Si por lo que fuera no tenían esta planta, las abuelas también confiaban en las virtudes “limpiadoras” de las semillas del cardo mariano. Antaño se reducían a polvo y se tomaba media cucharadita al día, pero ahora puedes comprar cápsulas o comprimidos ya preparados en los herboristerías.