Cabello brillante y sin canas: Los espárragos trigueros son muy ricos en ácido fólico, un nutriente básico no sólo para la salud sino también para la belleza de tu pelo. Si quieres retrasar al máximo la aparición de las canas y mantener el cabello suave y frondoso, come con frecuencia espárragos trigueros (los de color verde). Su alto contenido en este importante ácido permitirá que no pasen los años para tu pelo.
Cura de espárragos para adelgazar: Bajísimos en calorías (sólo aportan 13 calorías por cada 100 gramos), los espárragos son uno de los alimentos más adecuados para las dietas de adelgazamiento. Al resultar, además, muy diuréticos y desintoxicates, te ayudarán a perder esos kilos de más que tanto se te resisten Para adelgazar unos cuantos kilos en poco tiempo, puedes realizar esta cura de espárragos. Consiste en tomar a diario, preferentemente para cenar, 200 gramos de espárragos frescos o en lata. Puedes acompañarlos por pescado o carne asados o a la plancha. Puedes aliñarlos con un chorrito de limón, hierbas aromáticas o una vinagreta ligera ¡nunca con mayonesa! Sigue esta cura durante una semana y podrás olvidarte de los michelines.
Contra la retención de líquidos: Si sospechas que a causa de tu sobrepeso pueda deberse a la retención de líquidos, toma espárragos con frecuencia (dos o tres veces a la semana). Esta verdura es muy rica en agua y hace aumentar el volumen de la orina. También puedes tomar el caldo de a cocción. En pocas semanas notarás una importante pérdida de volumen en as zonas más “conflictivas” de tu cuerpo.
Piel sin acné ni puntos negros: Cuando hiervas espárragos, no tires el agua de la cocción. Embotéllala y utilízala como un tónico, aplicándola directamente sobre la piel con un algodón por la mañana y por la noche después de la limpiadora. Es un producto ideal para limpiar las pieles grasas con problemas de acné y puntos negros.