Baño adelgazante: Si estás a dieta, el laurel te puede echar una mano para perder esos kilos que te sobran. Hierve durante diez minutos 150 gramos de hojas de laurel y 100 gramos de hojas de hiedra terrestre en dos litros de agua. Deja que repose, fuera del fuego, durante otros diez minutos y filtra. Añade esta infusión al agua del baño y permanece en ella un cuarto de hora. El laurel tiene la virtud de movilizar las grasas y facilitar su eliminación.
Adiós a la caspa: Nuestras abuelas solucionaban este problema a base de enjuagues de laurel. Haz una infusión echando unas cuantas hojas de laurel en medio litro de agua caliente y enjuaga el pelo con ella después de lavarlo. El laurel es antiséptico y purificante.