Almohadas sedantes: El suave aroma de la manzanilla tranquiliza los nervios y predispone al sueño. Para dormir mejor, una buena idea es elaborar lo que se denomina una almohada sedante. Rellena una funda de almohada de algodón hasta la mitad con flores secas de manzanilla. A continuación, acaba de llenarla con otras plantas sedantes (tila, angélica, lúpulo, melisa, etc.) y ciérralo. Duerme sobre ella y soñarás con los angelitos.