
Combatir la hipertensión: Para que la tensión arterial no te dé ningún susto, además del tratamiento que te haya aconsejado el médico, toma esta bebida con regularidad. Te ayudará a superar el problema. Bebe esta leche en distintas tomas a lo largo del día.
Necesitarás: El zumo de tres limones, un litro de leche, tres dientes de ajo trinchados y una cebolla picada.
1- Echa el ajo y la cebolla en leche.
2- Pon la leche al fuego y retírala cuando hierva.
3- Cuando esté fría, añade el zumo de limón.
Dolor de cabeza: Parte un limón en dos y pasa una de las mitades por las sienes durante un par de minutos. Te aliviará.
Evitar la ronquera: El zumo de limón suaviza a garganta. Haz gárgaras con zumo de limón y agua antes de irte a dormir y conseguirás una noche sin ronquidos.
Dolor de oídos: Un remedio tradicional y muy efectivo para combatir el intenso dolor que producen las otitis es introducir en el oído un algodón empapado en zumo de limón.
Remedios contra sabañones: Con el frío, llegan los sabañones. Para combatirlos, puedes frotarlos con medio limón. Al estimular la circulación en la zona, conseguirás aliviar el dolor y acelerar su curación.
Jarabe contra los gases: Vierte una taza de agua hirviendo sobre tres limones cortados a rodajas y déjalo en infusión durante toda una noche. Al día siguiente, y preferentemente en ayunas, filtra el preparado y bebe el líquido resultante a pequeños sorbos. Esta sencilla medida aliviará la flatulencia.
Para rendir más en la práctica de un deporte: Los deportistas deberían saber que si toman zumo de limón antes de hacer ejercicio rendirán mucho más. Conseguirás una excelente bebida energética exprimiendo tres limones y añadiendo al zumo tres cucharadas soperas de miel. Tómalo inmediatamente antes de hacer deporte y notarás la diferencia.
Aftas en la boca: Para combatir esta frecuente dolencia, que tan rebelde suele resultar a todo tipo de tratamientos, no hay nada mejor que los enjuagues con limón. Tan sólo tienes que añadir el zumo de un limón y una cucharada de miel a una taza de agua. Realiza enjuagues dos veces a la semana hasta que desaparezca.