Panochas contra la gota: En algunos pueblos de centroeuropa, la gota se combate, todavía hoy, con este viejo remedio. Consistía en asar las panochas de maíz enteras y comer a diario los granos sin ningún tipo de aderezo. Si no tienes tiempo para ponerte a asar panochas, puedes recurrir al maíz congelado. Hervido o asado al horno es igualmente eficaz.

Alivia el dolor de los cólicos de riñón: Tanto comer los granos de maíz dulce como beber infusiones de cabellera de maíz (en herboristerías y dietéticas) son costumbres muy recomendables para evitar las irritaciones del aparato urinario que producen los cálculos renales. Puedes tomar las dos cosas tanto para aminorar el dolor durante los ataques como para prevenir su aparición.

Tranquilizante natural: El maíz aumenta la capacidad del organismo para luchar contra el estrés. El secreto está en su altísimo contenido de tiamina, que, además de actuar como sedante, estimula la mente y aumenta la capacidad intelectual. Para conseguirlo, basta con consumir maíz con frecuencia.