CALÉNDULA– Lo mejor para aliviar las escoceduras de un bebé es dejarlo el mayor tiempo posible con el culito al aire. Además, mi abuela recomendaba efectuar los lavados en la zona con infusión tibia de caléndula, romero y flor de saúco. Esta infusión calmaba la irritación y ayudaba a curar las molestas escoceduras. También resulta muy eficaz la pomada de caléndula (en herboristerías).
EL PIPÍ QUE NO HACE PUPA- Las abuelas también recomendaban dar a los bebés escocidos pequeñas cantidades de infusión de manzanilla. Esta planta hace que el pipí sea menos ácido y no irrite tanto la piel. Si le estás dando el pecho a tu bebé, bebe también tú una infusión suave de manzanilla y evita los alimentos fuertes y especiados.
HUEVO– Cuando la irritación resulte muy molesta, “pinta” el culito de tu bebé con yema de huevo cruda ligeramente batida. Retíralo con agua al cuarto de hora. El huevo hidrata y calma la piel.