A LA RICA BERENJENA– No es un alimento excesivamente nutritivo, pero tiene una ventaja respecto a todos los demás. Y es que la berenjena tiene la capacidad de aumentar los niveles de colesterol “bueno”. Mi abuela confiaba mucho en ella pero, eso sí, recomendaba cocinarla sin grasa añadida.
SOJA– En los países orientales no saben lo que es el colesterol. La razón de esta (ignorancia) es la soja. Y es que el consumo diario de este vegetal aumenta en un 9% el colesterol “bueno”. Puedes tomarlo en cualquiera de sus formas (brotes frescos, tofu, leche…), pero para un efecto mas contundente no hay nada mejor que la lecitina de soja. Toma una cucharada de este suplemento al día.
TISANAS– Hay una serie de plantas que, tomadas en infusión, son capaces de plantarles cara al colesterol “malo”. Toma dos tazas de infusión de diente de león, lavanda, fumaria o menta al día y verás como consigues aumentar los niveles de colesterol “bueno” en tu organismo.