GENCIANA, EL REMEDIO ALPINO– La genciana es una planta originaria de los Alpes con la que se preparan licores de sabor amargo como la angostura. Su infusión se utiliza para abrir el apetito, facilitar la digestión y, sobre todo, para favorecer la absorción de nutrientes como el hierro y la vitamina B 12. No la tomes, sin embargo, si estás embarazada. Mi abuela recomendaba preparar un cocimiento añadiendo 20 gramos de raíz de genciana en tres cuartos de litro de agua y llevándolo a ebullición. Se aflojaba el fuego y se cocía a fuego lento durante siete minutos. Se filtraba y se tomaba una cucharada tres veces al día.
LA NUTRITIVA ALFALFA– Esta planta, tradicionalmente utilizada como forraje, es un alimento muy nutritivo. Su ingestión se recomienda especialmente en la convalecencia, ya que ayuda a asimilar los nutrientes. Añade unos cuantos brotes de alfalfa a tus ensaladas y te encontrarás mucho mejor.
ABRIR EL APETITO– Cuando, además de no asimilar bien los alimentos, nos encontramos desganados, lo mejor es confiar en la infusión de hojas y flores de achicoria.